En Valldaura Labs de Barcelona se encuentra TOVA, el primer edificio impreso en 3D del país. Se produjeron cero residuos y casi cero emisiones de carbono durante la construcción. Esto gracias a la impresora Crane WASP y suministros y mano de obra totalmente locales.
El programa 3D Printing Architecture (3dPA) del Instituto de Arquitectura Avanzada de Cataluña (IAAC) creó este sistema de fabricación, que puede utilizarse para abordar crisis de vivienda en cualquier parte del mundo.
El prototipo de TOVA fue el primer edificio impreso en 3D en España.
Para su cimentación se utilizó un geopolímero y para la construcción de este edificio se utilizó una mezcla de tierra con aloe, claras de huevo y enzimas encontradas a 50 metros del centro de impresión, a toda esta mezcla se le añadió un aditivo impermeable para el techo de madera instalado para ayudarlo a resistir las duras condiciones climáticas.
Este modelo de construcción tiene innumerables aplicaciones potenciales, puede acomodar edificios intrincados y de vanguardia que disminuirían el impacto ambiental que la construcción tiene actualmente cuando se usa junto con otros sistemas de construcción.
La estructura responde al clima mediterráneo y tiene emisiones que son casi nulas. Puede disminuir el impacto ambiental de la construcción y usarse para una variedad de propósitos, incluidas residencias privadas y áreas públicas.
Este modelo de construcción posee una cantidad infinita de aplicaciones. Puede desarrollar edificios intrincados y vanguardistas que benefician al impacto ambiental que tienen las construcciones actuales al complementarse con otros sistemas de edificación.